miércoles, octubre 24, 2007

Para el Lalo

Hola Lalo,

Nunca te dijimos abuelito, siempre para nosotros fuiste Lalo. Y por eso empezamos así: Hola Lalo, con una carta, una sencilla y simple carta es la forma más fácil de transmitir sentimientos. Y así creemos tus nietos que es la mejor forma de decirte algunas últimas palabras.

En estos momentos de despedida no podemos dejar de pensar en la forma en que nos expresabas tu cariño, tus golpecitos en la cabeza mientras nos jalabas lentemente el cabello y en tu boca una sonrisa de oreja a oreja. Nunca fuiste el abuelito querendón que nos llenó de besos y abrazos. Pero sabíamos que nos querías, a tu manera de tu forma y nunca lo pusimos en duda cuando nos mostrabas los nuevos arreglos del campo, tus nuevas adquisiciones, tus nuevos animales.

Los animales, tu nos hiciste amar a los animales, el caluga, la perlita y otros son un ejemplo. Como olvidar a el copihue 1 de la casa de ángol, al copihue 2 con sus pecas, al loro Pancho con sus tantas groserías, la chancha Josefina y muchos más.

Eras todo un patrón de fundo, todo lo que decías se tenía que hacer y por su puesto muy llevado a tus ideas, y de alguna forma todos te agradecemos eso, a pesar de no tener la mejor educación, has sacado adelante una gran familia, con exitosos profesionales y excelentes personas.

Y esas personas somos nosotros, tus hijos, tus nietos, dejaste un bello legado en cada uno de nosotros, porque todos tenemos algo tuyo. Pero además tenemos diferentes proyectos a futuro, la Andrea se nos casa y los bisnietos, estamos seguros, no tardarán en llegar. Pero ahí estará la Mati para representarlos a los dos, para acompañarnos en todo lo que se viene y en todo lo que pasará. Tuviste la suerte de tener una gran esposa, y la cuidaremos por ti, que no te quede duda de eso.

A modo de despedida, solo decirte que te queremos, tal vez nunca lo dijimos, tal vez es un poco tarde, tal vez suene raro, pero para nosotros es importante… te queremos y te extrañaremos Lalo.

Tus nietos